Ese Zurdo Dilema

Aquel sector por el andaribel izquierdo es la zona mas desastrosa de Boca en lo que va del año. Neri arrancó siendo titular, teniendo un buen nivel, pero con el correr de las fechas su nivel fue decayendo cada vez mas y mas, al punto de errar pases de 1 metro de distancia o intentar parar la pelota y que ésta inexplicablemente le rebote. A pesar de su flojo rendimiento, el mejor nivel de Román de toda su carrera futbolística hizo que Boca se consagrara campeón de la Copa Libertadores por sexta vez. Vino el receso de la Copa América, y sinceramente creí que Neri iba a recuperarse pero no fue asi, siguió jugando mal, caminando la cancha, aportando nada, y aun sigo sin entender porqué.

Lo reemplazó Dátolo, hasta ese entonces demostrando mas ganas que otra cosa, pero en principio eso conformaba. Dátolo alternó, tuvo partidos buenos, otros muy malos, pero también hay que decir que jugó al nivel que viene jugando Boca en este segundo semestre: mal. Lo peor del caso es que Dátolo, aún rindiendo bien siempre salió reemplazado, saliendo notablemente fastidioso e irrespaldado. En cambio Ledesma jugó los 90 minutos todos los partidos, el resultado quedó expuesto en el superclásico.

Al bajo nivel de Dátolo vuelve Neri, no contra cualquiera sino contra San Lorenzo, último campeón. Boca ganó pero Neri jugó mal, pero Boca ganó y equipo que gana no se toca (no es mi filosofía pero pareciera que sí para Russo). Jugó 4 días después el superclásico, para terminar de confirmar que necesita ir a prestamo a otro equipo o descansar hasta fin de año, de una manera u otra las contemplaciones se terminaron, y la paciencia nuestra también.

¿Y ahora? Jugadores tiene que haber. Trajeron a un tal Gonzalez a mitad de año, muy pocos lo conocen y aun siguen sin conocerlo demasiado porque jugó muy pocos minutos estos meses, pero tal vez uno podía pensar que sería el reemplazante de los otros dos difuntos; pero no, vuelve al primer equipo Fabián Vargas, campeón de todo con Dios Bianchi, jugó a prestamo en Inter de Brasil por inactividad, volvió y nunca jugó ni 10 segundos, todos sabemos como juega: corriendo de atrás y pegando patadas. Pero tal vez sea lo que Boca hoy necesita: alguien nuevo que al menos se sienta entusiasmado de vestir tan pesada camiseta.